Juan Miguel Dominguez Prieto Notas que he escrito recientemente (7 de diciembre) durante una hora de Adoración al Señor Expuesto a mi pobreza en la custodia
A Ti me acojo
enteramente, Señor, en el Seno de tu Madre.
Ensancha mi mente por
la profundidad de Tu Humildad, mas en la incomprensible pureza de La
Electa.
Me veo alentado en mi
esfuerzo por saborearte en honduras. Tú me das a saborear lo que quieres, y me
estoy anchamente contigo.
Marana
tha.
Decir Ven, Señor
Jesús es pedir poder-decir “voy, Señor Jesús” en Espíritu y Verdad, pues Tú
Estás conmigo, y soy el que voy –mas viniendo Tú a mi ir.
“Ven-voy” son los
frutos del Amor.
“Ven” no es “Señor,
que Te vea”, sino “Señor, que vea” (“si tu ojo está sano...”).
“Ven” no es “te he
preparado la mesa”, sino “me has preparado la Mesa”.
(En la Eucaristía
Creas la Mesa, y luego decimos: “Ven, Señor Jesús”).
CantarTe “Ven”, oh
Inmutable, es “no mudarme” (stª. Teresa) a tu cada pasar por mí a cada instante,
es no mudarme al paso de tu Inteligencia incomprensible.
Decir “Ven” es
dejarte Hacer [a Ti], Oh Dios, obedientemente. Decir “Ven” es decir
“Haz”.
Decir “Ven” es
reconocer que Eres Grande para Humillarte en la Gran Humildad,
y que sólo Tú puedes
hacerlo y habitarnos.
Desearíamos darte
posada, y Tú Vienes a hospedarnos.
Desearíamos
dignificarte, y Eres Tú El Que nos divinizas.
Desearíamos decirte
algo puro, y Eres Quien nos Apalabras para Ti y en Ti.
Tú Eres, mas mi ser
es tu gloria y tu delicia.
Oh Infinitud que
irrumpes en la finitud, haciéndola tu Infinitud Humillada.
Oh Total Fuente que
clama “Tengo sed” para que todas otras fuentes salten a Tu Vida.
¡Gloria a Ti,
Impronunciable por Quien canto!
Juan Miguel Dominguez Prieto Notas que he escrito recientemente (7 de diciembre) durante una hora de
Adoración al Señor Expuesto a mi pobreza en la custodia